sus medios.
Estamos mal, qué mal, muy mal,
pues somos crédulos, estúpidos, farsantes.
Incluso tú. Incluso yo.
¿Dónde están nuestros cerebros?
¿En qué momento los perdimos?
Chico, ¡ya estamos muertos!
Se miente mucho y se miente mal
pero es que, chico,
¡ya estamos muertos!
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